¿Cada cuánto debe hacerse una revisión visual de un niño?

revisión visual de un niño

La salud visual es fundamental para el desarrollo de los niños. Aunque muchos padres piensan que los problemas de visión solo se notan cuando los niños tienen dificultades para leer o ver la pizarra en la escuela, lo cierto es que una revisión visual a tiempo puede prevenir muchos problemas. Hacer la revisión visual de un niño es un aspecto clave para asegurar que su vista y su desarrollo cognitivo vayan de la mano. 

Soy Julia Cavero y como Optometrista Infantil en Huesca, te quiero ayudar a conocer cuándo y por qué es importante llevar a tu hijo a revisión.

¿Por qué es esencial revisar la vista de un niño?

El 80% del aprendizaje de un niño depende de su visión. Desde que nacen, sus ojos están en constante desarrollo, y cualquier problema no detectado puede afectar su rendimiento escolar, su desarrollo social y emocional. Sin embargo, los niños no siempre son conscientes de que tienen problemas visuales, ya que nunca han experimentado una visión normal. Esto hace que muchos padres no se den cuenta de que algo no está bien.

Los problemas de visión más comunes en los niños incluyen:

  • Estrabismo: cuando uno o los dos ojos se desvían.
  • Ambliopía: comúnmente conocida como ojo vago.
  • Alteraciones en la visión binocular (coordinación entre ambos ojos) y la acomodación (el enfoque)
  • Disfunciones de los movimientos oculares.

Por ello, las revisiones visuales en niños de manera periódica son clave para detectar cualquier alteración en el desarrollo visual de tu hijo.

¿Cuándo se recomienda una revisión visual de un niño?

Calendario recomendado según la edad

  1. Desde el nacimiento hasta los 6 meses
    Aunque es raro, algunos problemas visuales pueden detectarse desde el nacimiento. Los recién nacidos deben ser observados por un pediatra para verificar su capacidad para seguir objetos con la mirada y responder a estímulos visuales. Si observas algo inusual, como un ojo que no se alinea o falta de respuesta a la luz, es recomendable acudir a un profesional de la visión.
  2. Entre los 6 meses y los 2 años
    A esta edad, la visión de tu bebé ya debe estar más desarrollada. Es importante que un especialista en visión infantil realice una revisión completa para detectar posibles problemas como el estrabismo o la ambliopía. Durante este período, los niños aprenden a coordinar sus ojos y comenzar a enfocar a diferentes distancias.
  3. De los 3 a los 5 años
    A los 3 años, la visión de tu hijo ya debe ser bastante estable. Es crucial realizar una revisión para comprobar que ambos ojos funcionan correctamente y se coordinan sin dificultad. Si notas que tu hijo tiene dificultades para leer, dibujar o enfocar, es hora de una consulta.
  4. De los 6 años en adelante
    Cuando los niños comienzan la educación primaria, es vital realizar una revisión visual. A esta edad, los niños empiezan a leer y escribir más, lo que puede revelarnos problemas visuales que antes pasaban desapercibidos. En esta etapa, las revisiones deben hacerse una vez al año.

Síntomas que indican la necesidad de una consulta visual infantil

Algunos síntomas pueden ser señales claras de que tu hijo necesita una revisión visual, incluso si no está en la edad recomendada para su revisión anual. Aquí te dejo algunos de los más comunes:

  • Se frotan los ojos constantemente o tienen ojos rojos.
  • Se queja de dolores de cabeza frecuentes.
  • Tiene dificultad para leer o copiar de la pizarra en la escuela.
  • Inclina la cabeza o cierra un ojo para ver mejor.
  • Se choca con objetos con frecuencia o tiene problemas con la coordinación.
  • Desvía uno o ambos ojos.
  • Parece no enfocar correctamente objetos cercanos o lejanos.

Si notas cualquiera de estos síntomas, no dudes en consultar a un optometrista. La revisión visual de un niño puede detectar problemas que, si se tratan a tiempo, pueden corregirse de manera efectiva.

¿Qué hacer si sospechas que tu hijo tiene problemas visuales?

No dejes pasar el tiempo. Si observas alguno de los síntomas mencionados o si simplemente quieres asegurarte de que la vista de tu hijo está en perfecto estado, te invito a realizar una consulta con un Optometrista Infantil. A través de pruebas específicas y adaptadas a su edad, podemos detectar problemas visuales que afecten su rendimiento y bienestar.

Recuerda, las revisiones regulares no solo aseguran que tu hijo vea bien, sino que también contribuyen a su desarrollo integral. Si necesitas más información o quieres agendar una cita, estoy especializada en optometría infantil y desde Huesca,  estoy aquí para ayudarte.

En resumen, las revisiones visuales son esenciales desde el nacimiento hasta la adolescencia. Asegúrate de seguir el calendario recomendado y estar atento a cualquier síntoma que indique la necesidad de una consulta. 

Si buscas optometrista infantil en Huesca, y tienes dudas sobre el tipo de revisión visual infantil o si los síntomas de tu hijo o hija encajan con alguno de los descritos arriba, puedes ponerte en contacto conmigo AQUÍ. 

No dejes que un problema visual pase desapercibido: ¡la visión es clave para el éxito de tu hijo!

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